Con el objetivo de profundizar en torno a los sistemas de derechos fundamentales de las constituciones normativas, la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile recibió la visita de un grupo de profesores de la Universidad de La Rioja, Universidad Carlos III de Madrid y Universidad Pública de Navarra, quienes presentaron los resultados de una investigación que se ha ido configurando por más de una década.
El pasado 6 de septiembre, los investigadores Ricardo Chueca (U. de La Rioja); Ascensión Elvira (U. Carlos III de Madrid); Amelia Pascual (U. de La Rioja); y Cristina Zoco (U. Pública de Navarra), expusieron en el seminario "La Frontera del derecho fundamental en la Constitución normativa: Crisis y cambio de los derechos fundamentales", organizado por el Departamento de Derecho Público. Por parte de la Casa de Bello, participaron los profesores Enrique Navarro (director del Depto. de Derecho Público); Liliana Galdámez (Centro de Derecho Humanos); y Lorena Donoso (Depto. de Derecho Procesal), mientras que la académica Gladys Camacho (Depto. de Derecho Público), estuvo a cargo de la coordinación del encuentro.
En una primera instancia, la profesora Pascual introdujo el objetivo del proyecto y cómo se ha desarrollado metodológicamente, de modo que permita profundizar sobre la noción de derechos fundamentales desde una perspectiva teórica-dogmática en cuyo marco se analizan derechos fundamentales concretos. Según señaló la docente, los profesores que visitaron Chile son parte de un grupo de investigadores, procedentes de nueve Universidades y centros de tres países europeos, que se ha ido configurando durante más de una década a través de un trabajo conjunto. Ellos, por segunda vez, han escogido la Universidad de Chile para presentar, a través de un diálogo académico, el resultado del proyecto de investigación que dio el título a la actividad.
Posteriormente, el profesor Chueca inició el diálogo planteando el problema que da inicio al proyecto, esto es, si los sistemas de derechos fundamentales de las constituciones normativas, logran superar el test de efectividad y eficacia, y si tienen capacidad de adaptación a las transformaciones que asistimos o más bien si ello ha generado una crisis de modelo o de sistema, que a resultas tiende a crear nuevos derechos. Esta problemática se extiende y envuelve la noción de persona y su relación con las cosas, cuestionando la posibilidad de constituir un derecho real sobre el propio soporte físico-material. Apuntó, a manera de ejemplo, como el registro de ADN ha obligado a una revisión radical de la idea biológica de vida (humana) y por tanto de ser humano, lo que tienen importantes consecuencias para el Derecho.
Por su parte, la profesora Elvira, planteó que la Constitución española contiene una lista cerrada de derechos fundamentales, situación que difiere de otros ámbitos como el caso portugués en el que se admiten expresamente la incorporación de nuevos derechos, o el caso alemán en el que por cláusulas generales se puede llegar a la misma situación. Con todo, en España se ha consolidado el reconocimiento jurisprudencial al menos de tres nuevos derechos: el de protección de datos personales, a la intimidad y la autonomía universitaria. Esta práctica jurisprudencial plantea el debate sobre dónde acaba la interpretación y dónde empieza la creación de los jueces, así como la existencia de los límites que éste debe respetar.
Según la académica, todo esto trae importantes consecuencias para la seguridad jurídica, valor esencial para el funcionamiento adecuado del sistema. Así, concluyó que la tendencia constatada a querer convertir todo derecho en fundamental, solo puede conducir a una pérdida de credibilidad de los derechos.
Finalmente, en materia del derecho fundamental al secreto de las comunicaciones, la profesora Zoco contrastó la doctrina constitucional que reconoce como el objeto de protección al proceso de comunicación a través de medio técnico, la que por el desarrollo de las tecnologías de la información y la comunicación, que no solo ha introducido nuevos dispositivos tecnológicos, sino nuevas modalidades comunicativas sin soporte (como correos electrónicos leídos, chats finalizados, informaciones, imágenes y comunicaciones directas), lo que deja al descubierto las comunicaciones directas, empujando así una evolución de la doctrina para superar este vacío. Complementariamente, señaló la configuración de un derecho constitucional sobre el entorno virtual propio por parte del Tribunal Supremo español, lo que según Zoco no se encuentra protegido por la Constitución española.