Destacados catedráticos y científicos extranjeros participaron el pasado 13 de noviembre en el Seminario Internacional de Bioética, espacio académico organizado por el Departamento de Derecho Privado, que brindó un debate de altura en torno a la ética y alcances jurídicos de los desarrollos científicos.
El seminario, que fue coordinado y moderado por María Isabel Cornejo, docente de la Facultad, contó con la presencia del destacado catedrático español de derecho penal, Carlos María Romeo Casabona, la doctora en psicología Natacha Salomé Lima y el investigador español Eduardo Rodríguez Yunta.
Las deliberaciones en la jornada se centraron en torno a los dilemas éticos y jurídicos que plantean las nuevas tecnologías de estudio e intervención en materia genómica, con particular énfasis en la llamada edición genética posibilitada por la técnica CRISP/Cas 9 y la criopreservación de embriones.
En su exposición, el profesor Romeo Casabona, quien se detuvo en Santiago de camino hacia el congreso de Derecho Penal que se realizó en Antofagasta, relevó la importancia de las regulaciones europeas enfrentadas a los desafíos que plantean las nuevas tecnologías. En esta línea, se refirió especialmente a la Convención de Oviedo y a la Declaración Universal de Genómica y Derechos Humanos, promulgada por UNESCO.
Posteriormente, el Doctor Rodríguez Yunta entregó una actualizada perspectiva sobre los aspectos científicos relacionados con la técnica de edición de genes y sus posibilidades actuales y futuras. El experto destacó la importancia de la mayor precisión que los procedimientos han alcanzado y la necesidad de anticipar regulaciones adecuadas.
Por último, la psicóloga y docente de la Universidad de Buenos Aires, Natacha Salomé Lima, planteó desde su práctica cuáles serían los problemas asociados con la criopreservación de embriones y las normativas vigentes en Argentina y otros países.
Los asistentes, provenientes de diversos centros de estudio capitalinos, tuvieron la posibilidad de plantear dudas e interrogantes a los expositores, resaltando en especial la conveniencia de mantener un adecuado análisis ético y jurídico de los desarrollos científicos. Así, concordaron en que se trató de una iniciativa que enriquece la reflexión sobre bioética y bioderecho en el contexto nacional.