"Portabilidad financiera: el rol del Ministerio de Justicia" - Joaquín Morales

Desde Enero de este año el concepto de la portabilidad financiera en materia hipotecaria ha ido cobrando fuerza. Esta busca, en teoría, que un deudor hipotecario pueda llevarse la deuda de su banco a otro, idealmente sin mayores costos operativos en busca de mejores condiciones crediticias.

En septiembre de este año, el Regulador Bancario, protagonista principal de esta iniciativa junto al Ministerio de Hacienda, informó al mercado la decisión de desarrollar una iniciativa de esta naturaleza que favorezca a los contratantes de productos crediticios, asegurándoles el acceso a la información financiera a sus créditos en tiempo y “con certeza y con transparencia”, como dijo el Presidente de la República en el Día de la Libre Competencia lo que de materializarse debiese genera mayor competencia entre los oferentes de crédito..

Pero esta iniciativa ya está enfrentando algunos obstáculos, como son las gestiones notariales y registrales derivadas de las inscripciones hipotecarias. Para solucionarlos se requerirá un tercer actor: el Ministerio de Justicia. El Ministerio de Justicia tiene mucho que decir respecto de la portabildiad y las modificaciones legales y reglamentarias que pudieran requerir instituciones como la prenda o la hipoteca. La experiencia Mexicana es ilustrativa.

Desde mediados del año 2014, está en funcionamiento en México un sistema que permite la portabilidad por la vía de cambio en el acreedor vía una simple escritura notarial que se anota marginalmente en la inscripción original manteniendo las garantías y el resto de las condiciones de la escritura original.

En el caso de México, identificada la entidad financiera que da condiciones crediticias más favorables, el deudor deberá solicitar al banco original un “estado de cuenta para efectos de subrogación”, el que deberá emitirse en un plazo de quince días corridos y si ello no ocurre, el interesado podrá concurrir a la CONDUSEF (Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros) a fin de que colabore con esta solicitud.

Este “estado de cuenta para efectos de subrogación” es básico para la operación y una vez que el interesado lo tenga, lo entregará al banco que te ofrece condiciones más favorables y este pagará el saldo del crédito al banco original y el crédito hipotecario quedará trasladado.

Bajo este sistema, la Asociación de Bancos de México (ABM), comunicó que, durante el año 2016, tuvieron lugar unos 26 mil traspasos de hipotecas desde un banco a otro y unos 8 mil en 2017.

Es de esperarse que pronto conozcamos las posiciones del Ministerio d.e Justicia en la materia que serán el correlato necesario a la iniciativa que lidera hoy el Ministerio de Hacienda y la Superintendencia de Bancos.

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